jueves, 19 de abril de 2012

Da gusto leer a Stéphane Hessel

Acabo de terminar la lectura de En resumen... o casi, el último libro de Stéphane Hessel, y he de decir que sus palabras siguen pareciéndome muy lúcidas y acertadas.


Es un placer encontrarse en el mundo a personas como este hombre que, a pesar de su avanzada edad, siguen teniendo mil proyectos e ideas en su cabeza, y continúan colaborando activamente en lograr una profunda transformación social.


Me ha encantado de nuevo leer las palabras de Hessel en esta obra por el mensaje optimista y esperanzador que transmite en su conjunto, muy apropiado en estos tiempos oscurantistas que corren, donde muchos entonan el sálvese quien pueda, pero pocos son capaces de entonar un profundo y claro mea culpa, haciendo tabula rasa y empezando de cero.


Hessel sigue viviendo muy intensamente el presente, algo que plasma en este libro. A su vez, no reniega de su pasado, compartiendo su vida con todos sus lectores, independientemente de nuestra edad, país o posición social. A mí me reconforta mucho leer sus textos, tengo la sensación de estar hablando (salvando las distancias, eso sí) con uno de mis abuelos sobre la vida en general, y eso es algo maravilloso que me hace seguir creciendo y mejorando como persona.

miércoles, 14 de marzo de 2012

"Ana Curra presenta El Acto": yo estuve allí

Pues sí, yo estuve allí, en el Teatro Kapital de Madrid, este pasado viernes, 9 de marzo de 2012. No quería perderme la ocasión de comprobar cómo sonarían en directo los temas de Parálisis Permanente (uno de mis grupos españoles favoritos de los 80) casi treinta años después de la desaparición de la banda, unida al triste fallecimiento en accidente de tráfico de su alma mater, el cantante y compositor madrileño Eduardo Benavente.







Sobre esta revisión del sonido Parálisis, a cargo de Ana Curra (teclista, cantante y compositora de la banda original, además de novia de Benavente) y un grupo de músicos, integrado por nombres como los guitarristas César Scappa y José Battaglio, el bajista Manolo Uvi, y el batería Rafa le Doc, ya se ha dicho mucho. Hay gente que opina que es un maravilloso regalo el que estos excelentes músicos nos hacen a los seguidores de Parálisis. Otros, en cambio, critican la actitud de Curra, por diversos motivos y circunstancias que a mí únicamente me parecen puristas y reduccionistas. Y, en la música, como en la vida, no hay nada peor, a mi juicio, que el purismo y el reduccionismo. ¡Viva el eclecticismo, viva el mestizaje! (eso sí, respeto las posturas puristas y reduccionistas, aunque no las comparta, en democracia la tolerancia debe prevalecer siempre).

Vale, lo confieso: por si no lo sabíais ya, nací en 1985, con lo cual me fue imposible (por obvias razones de tiempo) ver en directo a la banda original (aunque haya visto mil y una veces las actuaciones y videoclips de Parálisis en Youtube, o en los DVD's del mítico programa televisivo La Edad de Oro, de Paloma Chamorro). Los viajes en el tiempo, desgraciadamente, no existen, pero la experiencia vivida la semana pasada en este concierto me hizo sentirme como si estuviese viendo al grupo original en el mítico Rock-Ola, o en El Jardín, "un día cualquiera" de los años 80.


Buenísimo sonido, buenísma puesta en escena... Genial la banda, perfectamente ensamblada (se notaba que detrás del espectáculo había muchas horas y muchos días de ensayo). Está claro que la voz de Ana no es la voz de Eduardo, pero el toque vocal y sonoro Curra ha revitalizado y engrandecido aún más los temas de Parálisis Permanente.


Fue, en palabras de la propia Ana, todo un requiem festivo, al que se sumó en un par de temas Rafa Balmaseda (bajista donostiarra de la última formación del grupo), y en el que había una gran concentración de espíritus por metro cuadrado en Kapital, prácticamente todos los difuntos de la Movida: Eduardo Benavente, Toti Árboles, El Ángel, Antonio Vega, los recientemente desaparecidos Enrique Sierra y Tony Vázquez (a los que un emocionado César Scappa homenajeó cantando Esto no es)...


Muchísmas gracias a toda la banda (Ana Curra, César Scappa, José Battaglio, Manolo UVI, Rafa Le Doc, Rafa Balmaseda) por este maravilloso concierto, un fabuloso regalo que quedará grabado para siempre en mi retina.









jueves, 8 de marzo de 2012

Mis últimas lecturas y mi último concierto

Acabo de terminar de leer, en esta última semana, dos obras que me han encantado.


La primera de ellas se titula Moriremos mirando. Es una selección de textos escritos por mi admirado Alberto García-Alix, fotógrafo, escritor y editor, que una vez más me ha vuelto a maravilar con los contenidos autobiográficos de sus reflexiones y sus guiones, dándome nuevas lecciones de pura vida.

La otra novela que acabo de terminar de leer, La hija del Este, me confirma que la escritora Clara Usón es una de las voces más solventes y aclamadas de la actual narrativa española, por su rigor, su lucidez y su madurez. Ésta es una novela que no deja indiferente al lector, ambientada en plena Guerra de los Balcanes, una contienda dura, terrible, sobre la que hacía falta escribir un libro tan bueno como este.


Y por fin llegamos al apartado relativo a mi último concierto. Tuve ayer la oportunidad de ver en directo, en el San Juan Evangelista de Madrid (popularmente conocido como "el Johnny"), a Los Evangelistas, banda creada por músicos granadinos de grupos como Lagartija Nick y Los Planetas, con el fin de homenajear al añorado cantaor Enrique Morente. Fue un concierto apoteósico, maravilloso, en el que el grupo (magistralmente acompañado al cante, en momentos puntuales, por Soleá Morente y Carmen Linares) nos regaló su particular homenaje a Morente, ese genio que siempre estará con nosotros por su forma de ver y amar la vida y la música.



lunes, 20 de febrero de 2012

Homenaje a Enrique Sierra

Este pasado sábado, 18 de febrero, por la mañana, nada más levantarme, mi padre me da una triste noticia, que me cae como un mazazo: Enrique Sierra ha muerto.


Este genial músico y productor español, madrileño del barrio de Moratalaz, ha fallecido a los 54 años, debido a problemas de salud renales que arrastraba desde hacía varias décadas. Para el recuerdo quedará su trayectoria musical, iniciada en grupos de barrio a finales de los 70 (como la banda de rock duro en castellano Vibraciones), y que continuó en bandas esenciales de la Nueva Ola/Movida, como el grupo seminal punk Kaka de Luxe, o mis adorados Radio Futura.


Enrique (o Sir Henry, como era conocido en aquella época) fue el único Kaka de Luxe de la formación estable que sabía tocar bien, dando sobradas muestras de su talento en Radio Futura (junto a los hermanos Santiago y Luis Auserón), y en otras formaciones interesantes como Los Ventiladores, Klub o 127. También, destacó en cuestiones de producción, realizando trabajos para artistas como Rosario Flores que le valieron premios (2 Grammy Latinos en el apartado Producción), y montando unos estudios de sonido y grabación (Estudios Diana) punteros en cuanto a calidad y profesionalidad.


No llegué a conocerle en persona (a pesar de que nos comunicábamos vía Facebook, red en la que se agradecían sus lúcidos comentarios sobre arte, política y vida en general), pero siempre me pareció un buen tipo y un excelente músico, que sorprendió también a todos por sus variados looks y su actividad y actitud vital. Descansa en paz, maestro, te echaremos de menos.

lunes, 13 de febrero de 2012

"Contraluz" de Juan Gatti

Este pasado sábado he tenido la oportunidad de ver una excelente exposición: "Contraluz", retrospectiva de la obra del artista plástico argentino, afincado en España, Juan Gatti. La muestra recoge una variada y cuidada selección de sus múltiples trabajos para prensa, industria discográfica, moda, cine..., trabajos en los que aparecen rostros conocidos como Alaska, Ana Belén, Miguel Bosé y Pedro Almodóvar.


Todo ello tiene lugar en un marco incomparable: la Sala de Exposiciones del Canal de Isabel II de Madrid (C/Santa Engracia, 125).


La entrada es gratuita, y la exposición (que os recomiendo a todos) estará abierta al público hasta el próximo 19 de abril.

jueves, 26 de enero de 2012

Una foto borrosa

Ayer por la tarde, el nómada que habita dentro de mí escuchó su voz interior. Esto fue lo que le dijo:


"Y pensé en todos aquellos

que pasaron por mi vida,

los que dejaron huella en ella,

los que anduvieron de puntillas.

Me pregunté cuánto tiempo tardarían

en cicatrizar las heridas.


Pensé en que moría

sin haber llegado a los veintisiete,

edad maldita para todo

amante del rock como yo.


Recordé a Jim, a Amy,

a Janis, a Jimi,

recordé a Eduardo,

la estrella más fugaz de todas,

muerto con apenas veinte años.


Sonaron en mi mente

los acordes del "Acto",

"Autosuficiencia", "Quiero ser santa"...


Me acordé de su foto

con los otros Pegamoides

paseando en barca por el Retiro:

Nacho, Ana, Carlos, Olvido.


Me dije a mí mismo

que no todo fue en vano,

que nunca el tiempo es perdido.


Pensé que aquella imagen

no era otra cosa

que una foto borrosa.


Finalmente, pensé en mi familia:

mis padres, mis abuelos,

mis tíos y mis primos,

mis fieles amigos.


Me dije: "Si muriese ahora,

aunque lo hiciese tranquilo,

les destrozaría la vida.

Me queda aún mucho que vivir,

mucha guerra que dar,

muchos caminos que elegir,

mucho mar por contemplar".

miércoles, 25 de enero de 2012

Mis actuales lecturas

Estoy releyendo una novela, a mi juicio, clave, por su atemporalidad, su calidad, y su estructura dramática e intimismo: El último encuentro, del genial escritor húngaro Sándor Márai (en esta ocasión, releo una vieja traducción de la obra, titulada A la luz de los candelabros).


A su vez, voy poco a poco avanzando en la lectura de Operación Gladio, la más reciente novela del escritor y poeta español Benjamín Prado (habitual colaborador de prensa y radio, y buen amigo de literatos y artistas como Luis García Montero, Joaquín Sabina y el ya fallecido poeta Ángel González).

jueves, 12 de enero de 2012

Un concierto navideño atípico




En primer lugar, MUY FELIZ AÑO 2012 A TODOS. Hacía tiempo que no publicaba nada en el blog, así que creo que la ocasión (cambio de año y finalización de las Navidades) es muy propicia para ello.


En estas fiestas, tuve la oportunidad, el pasado viernes 23 de diciembre de 2011, de asistir a un atípico concierto navideño en la Sala El Sol de Madrid. Compartieron cartel los Hermanos Cubero (originalísimo dúo folk de Guadalajara, afincado en Barcelona), quienes, armados de sus voces, mandolina y guitarra acústica, interpretaron temas propios y coplas clásicas del cancionero castellano con un interesante toque country.


A continuación, salió a escena el gran Víctor Aparicio Abundancia, Víctor Coyote (en la foto), artista multidisciplinar, gallego de nacimiento y madrileño de adopción, con una larga trayectoria a sus espaldas. Este nombre clave en la historia reciente del pop-rock español (con su liderazgo, en los 80, del interesante grupo Los Coyotes), sigue apostando claramente por el mestizaje, por la world music. Y nos lo demostró esa noche, cantando en castellano, inglés y portugués, villancicos, píldoras pop, cumbias y muchas otras piezas, acompañado en ocasiones de los Hermanos Cuberos y músicos como el ex-batería de Los Ronaldos Ricardo Moreno. Además, utilizó gran variedad de instrumentos (guitarras, teclados, ukelele, zambomba...), dejando también, a lo largo de la actuación, claras muestras de su finísimo sentido del humor.


Los Hermanos Cubero y Víctor Coyote son músicos de calidad y solvencia, que abogan por la tradición, la innovación y el mestizaje, y nos regalaron una maravillosa actuación navideña.